Políticas de comentarios de las cuales podemos aprender [blogging]

Cuando un blog crece lo suficiente para acumular spam, comentarios off-topic y ataques de odio a entradas que ni la deben, es hora de empezar a considerar la conformación de una política de comentarios, la cual sirva de guía para moderar la retroalimentación en cada uno de los casos.

Cada blog tiene su personalidad y su forma de ser adoptado por sus visitantes, pero creo que son 4 políticas muy interesantes de las que podemos aprender si tienen un blog, tumblr o incluso twitter.

La primera y más antiguo ejemplo que tengo en mente es la política de la Red de Blogs de Hipertextual (donde se escriben ALT1040, Applesfera, Extracine y otros).

En ella dejan claro que no siempre eliminan los comentarios, ni evitan que se arme una acalorada discusión, pero que hay límites que solo la administración determina. No tienen piedad en este punto, pues si te consideran troll o spam te bannean inmediatamente.

Este párrafo define el resto:

Nuestros blogs no son medios tradicionales, no somos objetivos y cada editor tiene libertad completa de borrar comentarios a discresión, en pocas palabras pueden hacer lo que quieran. Si tu comentario fue borrado y no cabe en ninguna de las razones anteriores por favor no insistas, tus comentarios con reclamos también serán eliminados y podríamos bloquearte. Esto no es una democracia y siempre podrás crear tu propio blog para expresarte en tu propio espacio.

Hipertextual no se hace responsable de los comentarios publicados.

En el segundo ejemplo podemos combinar dos políticas: la del Instituto Americano de las Artes Gráficas (AIGA) y la del blog BoingBoing.net.

Ambos son sitios muy reconocidos, el primero para artistas visuales y el segundo como un diario de toda clase de contenido raro pero creativo.

En resumen, ambas políticas escriben que si los comentarios no aportan constructivamente a la conversación, el moderador tendrá la facultad de eliminarlos. Promueven (casi imponen) el trato respetuoso hacia el autor de la nota y entre los lectores que comentan, así como la buena redacción y coherencia en los argumentos comentados.

Ojo que no hay que confundir las políticas con una tiranía de parte de los administradores del sitio. "Nosotros cometemos errores, pero también los arreglamos" apunta la política de BoingBoing.net, la cual es mucho más detallada que la de AIGA, puesto que el segundo es un foro más cerrado a profesionistas del diseño. Noten que ambos tienen una página específica para describir su política de comentarios, de la cual podemos encontrar su link cada vez que vayamos a hacer un nuevo comentario.

Otro punto importante en lo que coinciden ambas políticas es que desmotivan fuertemente el uso de comentarios anónimos para postear, reservándose el derecho de publicarlos.

En este blog (El diario colectivo), cualquiera puede comentar incluso sin cuenta de bloggger o registro de OpenID, ya que al principio nos dimos cuenta que era muy molesto para los visitantes tener que hacer login para poder comentar. Desgraciadamente, con esto, blogger también permite que usuarios anónimos comenten. De esta manera moderamos de forma posterior, si lo vemos necesario. De entrada no se modera y el autor recibe los comentarios, pero todos pasan por el panel de revisión de comentarios, y son eliminados en caso de tener un motivo únicamente ofensivos o de spam.

La tercera política y tal vez la más interesante es la que adoptó LaughingSquid.com

Laughing Squid es una empresa estadounidense reconocida por proveer hosting y por su blog de Arte, Cultura y Tecnología, con gran influencia en Internet. Recientemente eliminó la capacidad de realizar comentarios en sus entradas.

Laughing Squid se dió cuenta que cada vez más los comentarios perdían calidad y relevancia como complemento de sus entradas, y toda la conversación se estaba transportando a las redes sociales: reddit, twitter, facebook, tumblr, digg... (ojo que Digg y YouTube son famosas por ser unas de las máquinas de odio más grandes de Internet, en lo que a comentarios respecta).

De tal manera, deciden que toda la conversación se lleve a cabo en esos lugares: que los republiquen todo en tumblr con sus notas añadidas, lo comenten en su propio blog, lo compartan en facebook, lo retuitéen, etcétera. Ellos se encargan de medir el impacto de sus entradas con diversas herramientas que existen para el rastreo. También consideren que moderar comentarios toma tiempo aún cuando hay herramientas de apoyo que eliminan el spam. De cualquier manera dejan su forma de contacto, sabiendo que no pueden cerrar la comunicación con sus lectores.

Esta última política fue la que adopté con el tumblr de Mexicali Rocks! un pequeño sitio donde se publican eventos interesantes en mi ciudad, sobre todo relacionados al rock, al entretenimiento alternativo y a la cultura libre.

Me di cuenta que cuando se publica un nuevo evento, no hay mucho que comentar de él. "Ah, que suave que se vaya a hacer algo así", o "ay, otra vez el mismo festival" o "uy, que bien, van a venir a tocar a Mexicali". Lo que sí que sucede es que la gente comparte el contenido con sus amigos por medio de correo electrónico o redes sociales, y el blog lo permite muy bien. Cada uno al fondo tiene su short URL para ser compartido. Al principio tenía instalado DISQUS, una maravillosa herramienta de gestión de comentarios, que prácticamente no era utilizada. Esto definitivamente, depende de cada blog. Hay blogs que reciben muchos comentarios constructivos y su autor se siente muy complacido a recibirlos y contestarlos. En nuestro caso, va por cada autor el responder o no, pero para esto mismo son más eficientes las redes sociales como twitter, donde puedes hacerle el comentario directamente a la persona que escribe, ¿no lo creen?

Espero que les haya parecido interesante esta entrada y recuerden que en cada una de las políticas que enlisto pongo el link para que las lean. La única que sí es bastante extensa y detallada es la de BoingBoing. Esperamos presentarles próximamente nuestra política de comentarios, aprendiendo de otros grandes blogs que han acudido a esta cuestión cada uno a su modo.